Participar para transformar la realidad: Día Internacional del Voluntariado
Esta semana participamos en el taller itinerante “Herramientas para las luchas feministas y migrantes” organizado por la ONG Alianza por la Solidaridad.
Tuvimos la suerte de poder ofrecer nuestra sede en Mérida como espacio para la celebración de las jornadas y dos personas del Consejo participamos como ponentes, desde presidencia y desde la vocalía de Igualdad y Derechos Humanos.
Queremos compartir hoy un pequeño resumen de las jornadas, especialmente en este día 5 de diciembre, en el que se celebra el Día Internacional del Voluntariado, y que nos sirve como marco excepcional para poner ene valor todo aquello que podemos cambiar desde el compromiso que conlleva la acción voluntaria.
En estas jornadas participaron varias organizaciones de nuestra comunidad autónoma, por una lado la Asociación de Mujeres Malvaluna ofreció un repaso histórico desde su origen hasta su actual relación con el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 5, que aborda la igualdad de género y la defensa de los derechos de mujeres y niñas. La Asociación que tiene un largo recorrido de trabajo en la protección de las mujeres víctimas de violencia machista, también conoce de cerca la situación de las mujeres en el entorno rural, y compartió una alarmante preocupación: aún hoy se sigue sin saber que es la violencia machista. Finalmente, desde la Asociación priorizan la educación que reciben chicos y chicas para combatir modelos de relación, y también inciden en que la legislación actual es buena pero no así su propios recursos, que deben por tanto, desarrollarse más extensamente.
Otra de las asociaciones invitadas fue la Fundación CEPAIM, que tiene una valiosa presencia en Extremadura desarrollando proyectos tan diversos como aquellos que están orientados a las nuevas masculinidades, programas de gestión de la diversidad, actividades para la inserción socio laboral de personas en riesgo de pobreza y/o exclusión social y proyectos dirigidos a la integración y protección de las personas migrantes, en especial de mujeres y menores en situación de refugio.
Además de estas aportaciones anteriores y las que pudimos hacer desde el Consejo de la Juventud de Extremadura, contando cuáles son nuestras principales líneas de trabajo en relación al feminismo y los movimientos migratorios, tuvimos la oportunidad de escuchar la experiencia de dos mujeres migrantes. Mujeres que no solo compartieron sus propias vivencias, también la de muchas otras personas que están envueltas en estos procesos migratorios, personas que están siendo perseguidas y colectivos que necesitan de nuestra ayuda para que puedan disfrutar de unas condiciones de vida dignas.
Como resumen os dejamos algunos de los retos que apuntamos y que son:
- Estar informadas siempre porque solo así se rompen los discursos de odio que recaen sobre las personas migrantes, en especial de los y las menores extranjeros/as no acompañados/as, que están siendo víctimas de estos discursos, aún cuando los Derechos de la Infancia están legalmente recogidos y reconocidos a nivel internacional.
- Identificar los beneficios de la cooperación al desarrollo porque nos permite intercambiar experiencias de feminismo con otras mujeres más allá de la territorialidad.
- Promover los pactos intergeneracionales en todos los ámbitos de trabajo por la defensa de los derechos humanos y generar experiencias compartidas entre varias generaciones de personas que se dedican al voluntariado.
- Favorecer el acceso a la participación como un derecho de todas y no como un privilegio de unas pocas.